El Holocausto no fue un acontecimiento singular, ni una manifestación terrible pero puntual de un ‘barbarismo’ persistente, fue un fenómeno estrechamente relacionado con las características propias de la modernidad. El Holocausto se gestó y se puso en práctica en nuestra sociedad moderna y racional, en una fase avanzada de nuestra civilización y en un momento culminante de nuestra cultura, es, por tanto, un problema de esa sociedad, de esa civilización y de esa cultura.
INDICE
Prólogo
1. Introducción: la sociología después del Holocausto
El Holocausto como prueba de modernidad
El significado del proceso civilizador
Producción social de la indiferencia moral
Producción social de la invisibilidad moral
Consecuencias morales del proceso civilizador
2. Modernidad, racismo y exterminio (I)
Algunas singularidades del extrañamiento de los judíos
La incongruencia judía desde la cristiandad hasta la modernidad
A horcajadas sobre las barricadas
El grupo prismático
Dimensiones modernas de la incongruencia
La nación no nacional
La modernidad del racismo
3. Modernidad, racismo y exterminio (II)
De la heterofobia al racismo
El racismo como ingeniería social
De la repugnancia al exterminio
Una mirada hacia delante
4. Singularidad y normalidad del Holocausto
El problema
Genocidio extraordinario
La peculiaridad del genocidio moderno
Efectos de la división jerárquica y funcional del trabajo
Deshumanización de los objetos burocráticos
La burocracia en el Holocausto
La bancarrota de las salvaguardas modernas
Conclusiones
5. Solicitar la cooperación de las víctimas
'Aislar' a las víctimas
El juego de 'salva lo que puedas'
La racionalidad individual al servicio de la destrucción colectiva
La racionalidad de la propia conservación
Conclusión
6. La ética de la obediencia (lectura de Milgram)
La inhumanidad como función de la distancia social
La complicidad después de los propios actos
La tecnología moralizada
La responsabilidad flotante
El pluralismo del poder y el poder de la conciencia
La naturaleza social del mal