En los últimos años, hemos pasado de celebrar la posibilidad de una participación de la gente común en la política a casi dimitir de ella. ¿Cómo salir de la crisis de la democracia? Necesitamos distancia histórica para comprender que existen otras maneras de plantear el gobierno del pueblo y claridad acerca de cuál es el mecanismo de la democracia que queremos poner en práctica. ¿Conseguiremos evitar caer en los brazos del fetichismo, tomando como evidentes e incuestionables las divisiones y los especialistas políticos?
Índice
Introducción
I. LOS POCOS, LOS MEJORES Y EL PRINCIPIO ANTIOLIGÁRQUICO
Las personas de bien, la ciudadanía y la excelencia «por composición» / El test antioligárquico y sus modulaciones
II. IMAGINÉMONOS, PARA VARIAR…
La realidad y sus posibilidades / La alucinación fetichista y cómo luchar contra ella
III. EL CONOCIMIENTO Y LA COMPETENCIA POLÍTICA
Los regímenes representativos y la aristocracia política / Los modelos tecnocráticos del capital político / El sorteo como virtud epistémica
IV. CONOCIMIENTO, MOTIVACIÓN Y MORAL: LAS ARTICULACIONES DE LA EXPERIENCIA DEMOCRÁTICA
La vinculación de tres dimensiones / La articulación virtuosa / Participación, motivación y trabajo / Posibilidades irritantes
Conclusión. El principio antioligárquico como guía crítica