En la vida, a menudo nos quedados atascados en un ciclo de reacción. Apagamos los fuegos. Tratamos las emergencias. Nos quedamos atrapados corriente abajo, intentando solventar un problema tras otro, pero nunca intentamos ir a contracorriente para arreglar los sistemas que causan esos problemas. Los policÃas detienen a los ladrones, los médicos tratan a los pacientes con enfermedades crónicas, y las personas que atienden las llamadas de los clientes responden a sus quejas. Pero muchos delitos, enfermedades crónicas y quejas de los clientes se pueden evitar. ¿Por qué entonces centramos tanto nuestra atención en la reacción en lugar de hacerlo en la prevención?