Régis Debray nos muestra en este incisivo “elogio” el anverso de “la aldea global”, concepto acuñado por Marshall McLuhan. A través de un ameno recorrido sobre el concepto de frontera en la historia, Debray nos reta a comprender que aquellos muros no han caído, que la idea de frontera no sólo no se ha diluido son que emerge en nuevas y sofisticadas formas. Y nuestro autor va más allá: su dimensión negativa también puede convivir –he ahí la complejidad– con una concepción que combata la imposición de la uniformidad. La frontera, en última instancia, como canto a la resistencia, a la diferenciación y, en palabras del pensador Aimé Césaire, como vacuna contra la “disolución en lo universal”. Una obra, en suma, provocativa y lúcida, que no nos dejará indiferentes.
Índice
I. A contrapelo
II. En el principio era la piel
III. Nidos y nichos, el retorno
IV. Cierres y portales, el ascenso
V. La ley de separación