Comienza su trayectoria teatral como actriz, pero a partir de 1975, después de fundar El Carrousel junto a Gervais Gaudreault, abandona la actuación para consagrarse exclusivamente a la escritura. En la actualidad, la dramaturga cuenta en su activo con más de 27 obras originales, tres adaptaciones y numerosas traducciones, es reconocida a nivel mundial como una figura clave de la dramaturgia para un público joven y figura entre los autores quebequenses más puestos en escena en el mundo con sus más de 150 producciones repartidas por los 4 continentes. Sus obras han sido publicadas a nivel internacional y traducidas a 25 idiomas: entre otras, Una luna entre dos casas, primera pieza de teatro canadiense escrita para la primera infancia, El ogrito y El ruido de los huesos que crujen fueron traducidas a seis, 13 y 10 idiomas, respectivamente.