El estudio de la historia es una indagación sobre el significado de la vida intelectual y colectiva de los seres humanos en el transcurso del tiempo. Hasta el momento -escribe Enrique Florescano- no se ha encontrado otra guía mejor para adentrarse en la complejidad de la existencia humana que este arte cuyos orígenes se remontan a los albores de la civilización.
Esta obra reflexiona sobre la labor desempeñada por los historiadores en la sociedad. Considera el papel social de la historia como disciplina científica y su función como forjadora de identidades, y como una reconstrucción critica del pasado. Por otro lado, analiza los pilares de a construcción historiográfica (prueba, explicación y representación literaria de la realidad) y estudia el redescubrimiento de la narrativa oral, la reconstrucción del pasado a partir del mito, y la relación entre la historia y la ficción.
Índice
[Presentación]
Introducción
Primera parte
LA FUNCIÓN SOCIAL DE LA HISTORIA
La nación de ciudadanos
Fundación de los claustros gremiales
Ocultamiento de los cimientos institucionales
Consolidación del poder burocrático
EL poder gremial
Historia del gremio y para el gremio
Segunda parte
LOS PILARES DE LA CONSTRUCCIÓN HISTORIOGRÁFICA
El salto de la memoria oral a la memoria escrita
Los efectos negativos de la escritura sobre los pueblos “sin historia”
La ruptura entre la memoria y la historia
Características de la memoria colectiva
La memoria y la responsabilidad con el pasado
La memoria como imperativo moral
Los historiadores de la Ilustración
Los historiadores de la Revolución francesa
La profesionalización del oficio
Tres maestros de la historia de la cultura: Jacob Burckhardt, Johan Huizinga y Mijaíl Bajtín
Bibliografía