Un panorama completo de las leras en el mundo hispanoamericano, desde sus orÃgenes hasta las generaciones subsiguientes al modernismo, contiene este primer tomo de la Historia de la literatura hispanoamericana. Las tendencias y escuelas predominantes y las aportaciones originales de nuestros paÃses aparecen mediante un método que comprende por igual el desarrollo de los distintos géneros. A la vez, Anderson Imbert destaca adecuadamente las figuras principales.
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Durante la conquista, los cronistas redactaron memoriales y obras históricas, escribieron cartas, relataron batallas, conservaron en letras escritas las costumbres de los naturales y, con ello, hicieron nacer la preocupación por la literatura. Poco antes de la Independencia, al infiltrarse las ideas revolucionarias de Francia, el ejercicio de las letras se vinculó con las luchas sociales e hizo que, en pocos grandes autores, convivieran el polÃtico y el escritor. Con el modernismo, que alcanzó su mayor altura con Rubén DarÃo, Latinoamérica obtuvo una personalidad propia que le dio la mayorÃa de edad y derecho a situarse al lado de las demás literaturas occidentales.
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