El crecimiento del turismo gastronómico, que en algunos países representa más del 50% del gasto turístico, conlleva grandes oportunidades y restos para todos los emprendimientos, empresas, negocios, establecimientos, starups…, en los cinco sectores productivos o económicos que integran las diversas cadenas de producción, suministros, distribución, comercialización, valor, consumo y reciclaje del sistema alimentario, relacionadas con la gastronomía y el turismo nacional e internacional, cuyas exigencias se han incrementado en temas de confianza, seguridad física y alimentaria, manejo de idiomas, servicio al cliente con hospitalidad, vocación, cultura gastronómica y turística, manipulación de alimentos con bioinocuidad, manejo de alergias, conectividad, bioseguridad, responsabilidad social, inclusión, sostenibilidad y regeneración territorial, etcétera.