«Este libro vuelve a las prácticas peatonales de, aproximadamente, la segunda mitad del siglo XIX y la primera del XX, desde la convicción de que la polÃtica del caminar, asà como su estética y su poética, ha adquirido recientemente un sentido de apremio e importancia renovada, sobre todo debido a la forma distraÃda que con frecuencia parece adoptar.» No existen los pasos perdidos. Cada paso y cada paseo están dotados de un sentido oculto, es decir, de una dirección, pero también de un significado, que apuntan hacia un Ãndice utópico por conocer. Entre la maraña de trayectorias y tensiones que han dado forma a nuestras ciudades, Matthew Beaumont sigue enEl caminante el rastro de las huellas que algunas de las voces más destacadas de la modernidad (Breton, Poe, Dickens, Chesterton, Woolf, Bataille) han dejado sobre las calles que transitaron infatigablemente para trazar los contornos de una poética y una polÃtica del caminar desde las que generar espacios de esperanza.