El libro es resultado de un esfuerzo considerable de análisis y aproximación al papel que cumplen los/as docentes en la transmisión de los roles de género y pautas de comportamiento a los/as estudiantes, de los grados primero y quinto de educación básica en dos instituciones (una mixta y la otra femenina) de carácter público, localizadas en el área urbana de Ibagué. El abordaje del problema desde la perspectiva de género permitió una mejor comprensión de los conflictos o de las tensiones que se presentan en el proceso de interacción entre docentes y estudiantes dentro del aula de clase. La investigación se adelantó en el aula de clase, considerada un microescenario en donde además de transmitir el conocimiento se aprehende la cultura. La escuela como institución social, enmarcada en una sociedad que se considera patriarcal, está diseñada y organizada con base en una prescripción de normas y valores que entrañan una construcción simbólica de feminidad y masculinidad.